Los Raiders podrían estar viviendo su última temporada en la ciudad de Oakland toda vez que su reubicación a Las Vegas va por buen camino.
Este miércoles se dio a conocer que la cuota (franchise fee) para mudarse está tazada entre 325 y 375 millones de dólares, una cifra bastante “barata” en comparación a los 675 mdd que tuvieron que pagar los Rams y Chargers para poder jugar en Los Angeles.
Lo único que falta es que los dueños de las franquicias aprueben el cambio y la próxima semana durante la junta anual se podría hacer oficial.
A diferencia de los Chargers, donde la ciudad de San Diego no propuso mucho dinero público para la construcción de un nuevo inmueble, el estado Nevada está dispuesto a desembolsar cerca de 750 mdd para que la “Ciudad de los Pecados” cuente con un equipo de la NFL.