Todo el peso de la ley a los delincuentes propuso Silvano Aureoles, quien descartó que tratar bien a los grupos criminales los va a hacer cambiar.
Así se expresó el mandatario michoacano, durante una conferencia ante medios, que ofreció tras la puesta en marcha de la segunda fase, del Plan Integral de Seguridad en Uruapan.
Aureoles Conejo consideró que al Gobierno Federal le hace falta más vigor a la hora de defender a las instituciones y de combatir al hampa, la cual se manifiesta a través de acciones como las ocurridas en La Huacana, cuando grupos armados, sometieron, desarmaron e intercambiaron por armamento prohibido, que originalmente les había sido decomisado, a elementos del Ejército Mexicano.
«Con los delincuentes no se dialoga, sino que se aplica la ley. Es inocente pensar que con diálogo y con buenos tratos a los grupos delincuenciales, van a cambiar de actitud. Eso es imposible».
Opinó que el «Gobierno Federal tiene que endurecer más su postura para defender a las instituciones. El Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, son las instituciones más respetables de país y sí dejamos que las vulneren ponemos en riesgo nuestra fortaleza como nación».
Recordó que la delincuencia organizada, se disfraza de fuerza social y que su modus operandi es despojar a conductores de sus unidades, atravesarlas en las carreteras y prenderles fuego; pero también escudarse tras mujeres y niños, a los que exponen como el menor que habría salido herido, el día de la privación de la libertad de los miembros del Ejército Mexicano, cuya respuesta calificó de prudente.
Y flaco favor le hacen a las instituciones, queriéndolas desacreditar, como lo hacen los delincuentes, sujetos como José Manuel Mireles, cuyas declaraciones contra el Ejército Mexicano calificó de irresponsables.
Aureoles Conejo expuso que precisamente los delincuentes aprovechan cualquier pretexto para pretender desacreditar a las instituciones y que acusar al Ejército lo único que provoca es hacer que los grupos criminales se envalentonen y que se les dé más poder.