Con unos 54 años de edad, las instalaciones del Centro de Salud de la Secretaría de Salud del Estado, ya resulta insuficiente no sólo para atender a las aproximadamente 500 personas que acuden al día, sino que sus instalaciones están en franco deterioro.
Desde febrero del 2012, cuando entonces era director, Gabriel Moreno Arango, éste ya advertía que de tan viejas las instalaciones podían colapsarse, que la instalación eléctrica del inmueble no había sido revisada en décadas y que las instalaciones hidráulicas también estaban deterioradas.
De hecho el lugar es riesgoso, ya que hace 4 años se suscitó una fuga de vapores, posiblemente de amoniaco, que afectó al personal y a los pacientes.
Incluso en ocasiones anteriores ha habido paros por parte del personal, el que ha reclamado que el Centro de Salud carece de equipo y que no cuenta con materiales básicos para ofrecerle atención a la gente que ahí acude y que precisamente es la más necesitada, dado que es la que no cuenta con seguridad social.
Como ya lo han venido denunciado usuarios, este sitio más que un centro de Salud es uno centro de insalubridad, pues la basura, por la que el camión recolector pasa una vez a la semana, y los desechos se acumulan; afuera hay puestos de venta de alimentos callejeros y los lunes, cuando se instala el tianguis conocido como el de la 5 de mayo, que en realidad ocupa muchas más calles que sólo esa, las instalaciones quedan sitiadas.
A simple vista se nota la carencia del mobiliario y en la plata alta se pueden apreciar escritorios de modelos antiguos que serían un lujo, pero para un coleccionista.
Por otra parte, en ocasiones, el patio y estacionamiento para personal del lugar deja ver junto al almacén de desechos biológico infecciosos, una gran cantidad de basura acumulada.
Dicho patio es además un verdadero cementerio de vehículos, ya que varios lucen abandonados desde hace tiempo, tanto como la maleza no se ha podado. Ahí se almacenan fierros viejos y trozos de carrocerías.
Además hay unidades que datan de años, pero también hay unidades más nuevas abandonadas, las cuales lucen aún los logotipos de la pasada administración estatal.