La administración del gobierno del presidente Donald Trump amenazó hoy con retener fondos federales hasta por 4.1 mil millones de dólares de dólares este año a los estados, condados o ciudades de Estados Unidos que se declaren “santuario” para inmigrantes indocumentados.
El procurador Jeff Sessions sostuvo que las jurisdicciones que se rehúsan a acatar peticiones de agencias federales para retener a indocumentados a fin de que sean deportados, no sólo violan la ley federal, sino que ponen en riesgo la seguridad pública y la seguridad nacional.
“Urjo vigorosamente a los estados, ciudades y condados del país a considerar cuidadosamente el daño que están haciendo a sus ciudadanos por negarse a cumplir nuestra ley migratoria y a repensar sus políticas”, dijo en rueda de prensa desde la Casa Blanca.
“Tales políticas hacen menos seguros a sus estados y sus ciudades. Están en juego la seguridad pública y la seguridad nacional. Y los ponen a riesgo de recibir fondos federales”, remató.
Desde su campaña presidencial, Trump prometió poner fin al apoyo federal a las ciudades «santuario» a raíz de que la ciudad de San Francisco liberó al inmigrante indocumentado mexicano Juan Francisco López Sánchez, acusado de causar la muerte a la joven Kate Steinle en San Francisco en 2015.
Como presidente, una de sus primeras órdenes ejecutivas incluía el congelamiento de fondos federales a las ciudades «santuario», pero hasta el momento no habían sido dados a conocer los detalles.
El caso de López, quien enfrenta un proceso legal por el asesinato de la joven, fue retomado por Sessions en su anuncio y puesto como ejemplo de que las acciones de las ciudades afectan la seguridad pública de los estadunidenses, especialmente de comunidades migrantes.